Alegría y espiritualidad
El coro inició su nueva formación en el año 2015, coincidiendo con D. Joaquín y ahora con el actual párroco D. Ángel.
Es un grupo de personas, entre niños y adultos, que va creciendo en número, con varias guitarras, pandereta y cajón flamenco. Son los padres y madres de los chicos y chicas que hacen catequesis, y que una vez hecha o bien abandonan, o bien continuan.
Los ensayos se producen los lunes generalmente, por la tarde. Y la puesta en escena, como no podía ser de otra manera, se produce en misa de doce los domingos.
La dirección del coro la lleva el cura, aprovechando sus conocimientos musicales, ya que estudió en el conservatorio de música. Algo que le viene muy bien a los integrantes, para mejorar sus cualidades vocales y musicales.
Necesitados de música
La música nos alegra, y nos hace salir del ruido del día a día. Practicar o escuchar música nos transporta a un mundo ideal, del que podemos aprender y sentirnos mejor.
Necesitados de cultura
Los artistas y músicos profesionales han creado para nosotros composiciones que nos engrandecen el alma, están creadas con la mejor intención y ello se transmite. Es lo bonito de la cultura.
Engrandecer las festividades del calendario
Celebrar los días de fiesta que son para nosotros, para nuestro descanso y beneficio espiritual. Los domingos y fiestas de guardar.
Ya hemos visto las cualidades que tiene tener un coro en la parroquia, y actualmente contamos con un grupo de padres e hijos, entre adultos y niños que llevan el proyecto adelante. Ellos entienden que la cultura, la música y las festividades son algo de nuestra sociedad y hay que mantenerlas.
Por eso, si quieres participar de estos valores, solo tienes que pasarte por la parroquia y solicitar información.
Aquí os dejamos una de las canciones, grabación realizada en un ensayo. Canta el párroco D. Ángel Mateos, que aparte de sacerdote, estudió en el Conservatorio de Música.